En el marco del Mes de la Solidaridad, la Agrupación Solidaria de Angol, integrada por diversas instituciones como el Hogar de Cristo, COANIQUEM, Bomberos, Cruz Roja, Universidad de La Frontera y el Centro Cultural Municipal, ha preparado una serie de actividades con el objetivo de fortalecer el espíritu comunitario y apoyar a los sectores más vulnerables de la comuna. El puntapié inicial se dio este 04 de agosto con un punto de prensa en la sede de la Cruz Roja Filial Angol y una entrevista en Tele Radio Angol, donde se destacó la importancia de la solidaridad activa en tiempos de crisis social y económica. Entre las actividades más destacadas del calendario se encuentra la Campaña Solidaria, que se realizará entre el 11 y el 15 de agosto, destinada a recolectar artículos de abrigo y aseo para personas en situación de calle. Esta iniciativa tendrá su punto de acopio en la Cruz Roja local. El 23 de agosto, se desarrollará un Taller de Primeros Auxilios Comunitarios, que tendrá lugar en la misma filial de la Cruz Roja entre las 9:00 y las 17:00 horas, abierto a toda la comunidad. Durante todo el mes, del 04 al 29 de agosto, se llevarán a cabo múltiples actividades organizadas por clubes y agrupaciones locales, cuyas fechas y horarios serán confirmados próximamente. A esto se suma la presentación artística “Cantos y Danzas del Valle de los Confines”, organizada por el Centro Cultural de Angol, que se realizará entre el 25 y el 29 de agosto a las 19:00 horas. La entrada consistirá en alimentos no perecibles o artículos de aseo personal. El cierre de las celebraciones será con una Expo Solidaria el 30 de agosto en el Parque Vergara de Angol, desde las 12:00 hasta las 17:00 horas, donde se reunirán instituciones y emprendedores con enfoque social. Des esto y otros detalles conversaron Marcela Osses y Carlos Hernández integrantes de la Agrupación Solidaria de Angol quienes visitaron nuestro programa Efecto Matinal y conversaron junto a Germán Pereda sobre esta agrupación y el calendario de actividades para este mes de agosto. La conversación completa quedó plasmada en el fanpage de Teleangol Radio.
El Parque Nacional Nahuelbuta, uno de los últimos refugios de bosque nativo en la Cordillera de la Costa, vive hoy una silenciosa pero profunda crisis ambiental, ecológica y política. Fragmentado, invadido por monocultivos, inseguro y sin una protección efectiva, este santuario natural agoniza entre el descuido institucional, la expansión forestal, el abandono por las autoridades y los embates del cambio climático. Según estudios recientes, en las últimas décadas se ha perdido más del 33 % del bosque nativo en la Cordillera de Nahuelbuta, siendo reemplazado mayoritariamente por plantaciones de pino y eucalipto. A pesar de su estatus como parque nacional, solo un 3,5 % del bosque original cuenta con protección efectiva, lo que evidencia una brecha estructural en la conservación del ecosistema. Uno de los símbolos más icónicos del parque, la araucaria araucana, ha sido gravemente afectada por el estrés hídrico y enfermedades asociadas al cambio climático. En 2018 fue clasificada como “en peligro de extinción” en la zona, y sin embargo, en 2020 la propia CONAF protagonizó un escándalo tras talar ilegalmente 51 ejemplares bajo la excusa de crear un cortafuego. La Contraloría General de la República confirmó la ilegalidad del acto, pero las consecuencias administrativas aún se consideran insuficientes. A este cuadro se suma la falta de seguridad, que quedó en evidencia tras el ataque incendiario de noviembre de 2022, donde fueron destruidas casas, bodegas y vehículos de guardaparques dentro del parque. Desde entonces, el Parque Nahuelbuta ha permanecido con acceso restringido y sólo se ha permitido el ingreso peatonal en algunos sectores, debido también al deterioro de caminos y senderos tras los temporales del invierno 2024. Pero a eso se le agrega este año las denuncias de tala ilegal de arboles nativos, ingreso de Jeeperos realizando asados y ganado de propiedad de personas circundantes al Parque. Dentro de toda esta realidad aflora la figura de la concejala Beatriz Sanhueza, quien solicitó a través del municipio oficiar a CONAF respecto a esta realidad, que preocupa en materia de medioambiente en nuestra ciudad. Mientras tanto, el accionar de las autoridades es muy lento y al parecer solo vemos reaccionar: recién a inicios de 2025 se anunció una inversión de 4.500 millones de pesos para recuperar la infraestructura del parque. Sin embargo, la restauración ecológica, el control efectivo de incendios intencionales (que ya representan más del 45 % en la región) y la protección de los ecosistemas siguen siendo tareas pendientes. Y peor aun, todo indica que esta inversión tan solo se quedará en el anuncio. El Parque Nahuelbuta no solo es un bien natural invaluable por su biodiversidad; también es un símbolo de lo que ocurre cuando los intereses extractivistas, el abandono institucional y la falta de voluntad política se imponen sobre la conservación del patrimonio ambiental. Hoy, más que nunca, el llamado es urgente: si no se actúa con decisión, Nuestro parque podría convertirse en una postal del pasado, un recuerdo de lo que alguna vez fue un pulmón verde irremplazable en la Cordillera de Nahuelbuta. .UNA DE NUESTRAS
El Centro Cultural de Angol se convirtió ayer en el epicentro de una significativa jornada de diálogo con el conversatorio “Las señales que no vi”, una iniciativa organizada por la agrupación Justicia para Constanza Herrera Zavalla, que buscó visibilizar y prevenir las primeras manifestaciones de violencia en las relaciones de pololeo y como estas van escalando frente a los ojos del entorno de las personas violentadas que no logran captar estas señales.. Con un auditorio atento y participativo, el conversatorio inició a las dando paso a Marcela Pardo Gaete y Rocío Ortega Vargas, en representación del SERNAMEG, compartieron sus experiencias y herramientas para identificar señales tempranas de violencia y fomentar una cultura de denuncia oportuna. El momento más emotivo de la velada lo protagonizó Ana Zavalla del Pino, quien compartió “Mi experiencia personal, mi estandarte para seguir luchando por las mujeres”. Conmovidos, los asistentes escucharon su relato, cargado de fuerza, en el que expresó su necesidad de búsqueda de justicia por su hija Constanza Herrera Zavalla. En su relato Ana comenta como se ha erigido como símbolo de resiliencia e inspiración para padres y madres respecto a esta realidad, alzando la voz en contra del silencio. La respuesta del público fue unánime: el conversatorio fue considerado un verdadero “éxito”. Se valoró la exposición de los temas tratados, la calidad de los contenidos y el tono cercano y personal de las exponentes, transformándolo en una jornada nutritiva para el alma, el conocimiento y la conciencia colectiva. Como cierre, las organizadoras extendieron una invitación a la comunidad a participar activamente en futuras iniciativas y mantener vivo el compromiso con la erradicación de la violencia de género, reconociendo que solo a través del diálogo y la empatía es posible construir vínculos más seguros y respetuosos .
Este martes 9 de julio, el Centro Cultural de Angol será escenario del conversatorio “Las señales que no vi”, una instancia de diálogo y reflexión para identificar y prevenir las primeras manifestaciones de violencia de género. El encuentro, que comenzará a las 18:15 horas, contará con la participación de Marcela Pardo Gaete y Rocío Ortega Vargas, representantes del SERNAMEG, quienes compartirán sus experiencias y visiones para fortalecer la prevención y la denuncia oportuna. Una de las voces destacadas será la de Ana Zavalla del Pino, quien expondrá su testimonio “Mi experiencia personal, mi estandarte para seguir luchando por las mujeres”. Previo a esta actividad, ella estuvo presente en el programa “Efecto Matinal”, donde conversó con Germán Pereda sobre la importancia de generar conciencia colectiva para reconocer las señales de alerta y erradicar la violencia contra la mujer. Su intervención se enmarca en un contexto doloroso: Ana continúa buscando justicia por la muerte de su hija, Constanza Herrera Zavalla, un caso que actualmente sigue en proceso de investigación judicial. Con respeto y fuerza, Ana se ha transformado en un símbolo de lucha para muchas mujeres, levantando su voz para que otras puedan reconocer las señales tempranas y no callar. La invitación está abierta para todas las personas interesadas en informarse y reflexionar sobre la violencia de género, desde una perspectiva de comunidad y apoyo mutuo.
Frente a la inexplicable decisión de la Municipalidad de Angol, de no contar con albergue este invierno, la Agrupación Olla Común de Angol a intensificado su labor solidaria, dado las bajas temperaturas y lluvias recientes que motivaron a esta comunidad a ir en busqueda del sector privado, para sumar aportes y apoyo. Dos personas con discapacidad, que viven bajo precarias condiciones junto a la ex Farmacia Municipal, recibieron ayuda gracias a estas gestiones. Situación que se agudiza, dado que el invierno recién comienza y ya golpea con fuerza a quienes no tienen un techo. En Angol, la Agrupación Olla Común de Angol, liderada por Katerine Arroyo, se ha convertido en el principal sostén para las personas en situación de calle, luego de que el municipio decidiera no habilitar un albergue para este año. A pesar de la falta de apoyo institucional, la fuerza de este Batallón de Amor y empresarios locales no han permanecido indiferentes. Durante las últimas horas, tras las lluvias y el frío intenso, nuevos colaboradores se han sumado con alimentos, ropa de abrigo y materiales para improvisar refugios. Un caso que refleja esta realidad es el de dos personas con discapacidad en sus extremidades que viven a un costado del Puente Vergara, en un sitio eriazo. Ellos han recibido abrigo y alimentos gracias a la solidaridad de quienes no los olvidan, donde la propia agrupación agradece a los empresarios Gerardo Cerda y Jorge Salazar por poner a su disposiciones materiales de construcción, trabajadores y herramientas para esta obra. @olla_comun_angol_respal2 ♬ sonido original - olla_comun_angol_respal2 Desde la Olla Común de Angol hacen un llamado a toda la comunidad a seguir apoyando, ya que se esperan semanas más difíciles para quienes no tienen un hogar. Quienes deseen colaborar pueden contactarse directamente con la agrupación al whattsap +56922472931 y colaborar con alimentos o sumarse como voluntarios a esta noble causa.
En el marco del Mes de la Solidaridad, la Agrupación Solidaria de Angol, integrada por diversas instituciones como el Hogar de Cristo, COANIQUEM, Bomberos, Cruz Roja, Universidad de La Frontera y el Centro Cultural Municipal, ha preparado una serie de actividades con el objetivo de fortalecer el espíritu comunitario y apoyar a los sectores más vulnerables de la comuna. El puntapié inicial se dio este 04 de agosto con un punto de prensa en la sede de la Cruz Roja Filial Angol y una entrevista en Tele Radio Angol, donde se destacó la importancia de la solidaridad activa en tiempos de crisis social y económica. Entre las actividades más destacadas del calendario se encuentra la Campaña Solidaria, que se realizará entre el 11 y el 15 de agosto, destinada a recolectar artículos de abrigo y aseo para personas en situación de calle. Esta iniciativa tendrá su punto de acopio en la Cruz Roja local. El 23 de agosto, se desarrollará un Taller de Primeros Auxilios Comunitarios, que tendrá lugar en la misma filial de la Cruz Roja entre las 9:00 y las 17:00 horas, abierto a toda la comunidad. Durante todo el mes, del 04 al 29 de agosto, se llevarán a cabo múltiples actividades organizadas por clubes y agrupaciones locales, cuyas fechas y horarios serán confirmados próximamente. A esto se suma la presentación artística “Cantos y Danzas del Valle de los Confines”, organizada por el Centro Cultural de Angol, que se realizará entre el 25 y el 29 de agosto a las 19:00 horas. La entrada consistirá en alimentos no perecibles o artículos de aseo personal. El cierre de las celebraciones será con una Expo Solidaria el 30 de agosto en el Parque Vergara de Angol, desde las 12:00 hasta las 17:00 horas, donde se reunirán instituciones y emprendedores con enfoque social. Des esto y otros detalles conversaron Marcela Osses y Carlos Hernández integrantes de la Agrupación Solidaria de Angol quienes visitaron nuestro programa Efecto Matinal y conversaron junto a Germán Pereda sobre esta agrupación y el calendario de actividades para este mes de agosto. La conversación completa quedó plasmada en el fanpage de Teleangol Radio.
El Parque Nacional Nahuelbuta, uno de los últimos refugios de bosque nativo en la Cordillera de la Costa, vive hoy una silenciosa pero profunda crisis ambiental, ecológica y política. Fragmentado, invadido por monocultivos, inseguro y sin una protección efectiva, este santuario natural agoniza entre el descuido institucional, la expansión forestal, el abandono por las autoridades y los embates del cambio climático. Según estudios recientes, en las últimas décadas se ha perdido más del 33 % del bosque nativo en la Cordillera de Nahuelbuta, siendo reemplazado mayoritariamente por plantaciones de pino y eucalipto. A pesar de su estatus como parque nacional, solo un 3,5 % del bosque original cuenta con protección efectiva, lo que evidencia una brecha estructural en la conservación del ecosistema. Uno de los símbolos más icónicos del parque, la araucaria araucana, ha sido gravemente afectada por el estrés hídrico y enfermedades asociadas al cambio climático. En 2018 fue clasificada como “en peligro de extinción” en la zona, y sin embargo, en 2020 la propia CONAF protagonizó un escándalo tras talar ilegalmente 51 ejemplares bajo la excusa de crear un cortafuego. La Contraloría General de la República confirmó la ilegalidad del acto, pero las consecuencias administrativas aún se consideran insuficientes. A este cuadro se suma la falta de seguridad, que quedó en evidencia tras el ataque incendiario de noviembre de 2022, donde fueron destruidas casas, bodegas y vehículos de guardaparques dentro del parque. Desde entonces, el Parque Nahuelbuta ha permanecido con acceso restringido y sólo se ha permitido el ingreso peatonal en algunos sectores, debido también al deterioro de caminos y senderos tras los temporales del invierno 2024. Pero a eso se le agrega este año las denuncias de tala ilegal de arboles nativos, ingreso de Jeeperos realizando asados y ganado de propiedad de personas circundantes al Parque. Dentro de toda esta realidad aflora la figura de la concejala Beatriz Sanhueza, quien solicitó a través del municipio oficiar a CONAF respecto a esta realidad, que preocupa en materia de medioambiente en nuestra ciudad. Mientras tanto, el accionar de las autoridades es muy lento y al parecer solo vemos reaccionar: recién a inicios de 2025 se anunció una inversión de 4.500 millones de pesos para recuperar la infraestructura del parque. Sin embargo, la restauración ecológica, el control efectivo de incendios intencionales (que ya representan más del 45 % en la región) y la protección de los ecosistemas siguen siendo tareas pendientes. Y peor aun, todo indica que esta inversión tan solo se quedará en el anuncio. El Parque Nahuelbuta no solo es un bien natural invaluable por su biodiversidad; también es un símbolo de lo que ocurre cuando los intereses extractivistas, el abandono institucional y la falta de voluntad política se imponen sobre la conservación del patrimonio ambiental. Hoy, más que nunca, el llamado es urgente: si no se actúa con decisión, Nuestro parque podría convertirse en una postal del pasado, un recuerdo de lo que alguna vez fue un pulmón verde irremplazable en la Cordillera de Nahuelbuta. .UNA DE NUESTRAS
El Centro Cultural de Angol se convirtió ayer en el epicentro de una significativa jornada de diálogo con el conversatorio “Las señales que no vi”, una iniciativa organizada por la agrupación Justicia para Constanza Herrera Zavalla, que buscó visibilizar y prevenir las primeras manifestaciones de violencia en las relaciones de pololeo y como estas van escalando frente a los ojos del entorno de las personas violentadas que no logran captar estas señales.. Con un auditorio atento y participativo, el conversatorio inició a las dando paso a Marcela Pardo Gaete y Rocío Ortega Vargas, en representación del SERNAMEG, compartieron sus experiencias y herramientas para identificar señales tempranas de violencia y fomentar una cultura de denuncia oportuna. El momento más emotivo de la velada lo protagonizó Ana Zavalla del Pino, quien compartió “Mi experiencia personal, mi estandarte para seguir luchando por las mujeres”. Conmovidos, los asistentes escucharon su relato, cargado de fuerza, en el que expresó su necesidad de búsqueda de justicia por su hija Constanza Herrera Zavalla. En su relato Ana comenta como se ha erigido como símbolo de resiliencia e inspiración para padres y madres respecto a esta realidad, alzando la voz en contra del silencio. La respuesta del público fue unánime: el conversatorio fue considerado un verdadero “éxito”. Se valoró la exposición de los temas tratados, la calidad de los contenidos y el tono cercano y personal de las exponentes, transformándolo en una jornada nutritiva para el alma, el conocimiento y la conciencia colectiva. Como cierre, las organizadoras extendieron una invitación a la comunidad a participar activamente en futuras iniciativas y mantener vivo el compromiso con la erradicación de la violencia de género, reconociendo que solo a través del diálogo y la empatía es posible construir vínculos más seguros y respetuosos .
Este martes 9 de julio, el Centro Cultural de Angol será escenario del conversatorio “Las señales que no vi”, una instancia de diálogo y reflexión para identificar y prevenir las primeras manifestaciones de violencia de género. El encuentro, que comenzará a las 18:15 horas, contará con la participación de Marcela Pardo Gaete y Rocío Ortega Vargas, representantes del SERNAMEG, quienes compartirán sus experiencias y visiones para fortalecer la prevención y la denuncia oportuna. Una de las voces destacadas será la de Ana Zavalla del Pino, quien expondrá su testimonio “Mi experiencia personal, mi estandarte para seguir luchando por las mujeres”. Previo a esta actividad, ella estuvo presente en el programa “Efecto Matinal”, donde conversó con Germán Pereda sobre la importancia de generar conciencia colectiva para reconocer las señales de alerta y erradicar la violencia contra la mujer. Su intervención se enmarca en un contexto doloroso: Ana continúa buscando justicia por la muerte de su hija, Constanza Herrera Zavalla, un caso que actualmente sigue en proceso de investigación judicial. Con respeto y fuerza, Ana se ha transformado en un símbolo de lucha para muchas mujeres, levantando su voz para que otras puedan reconocer las señales tempranas y no callar. La invitación está abierta para todas las personas interesadas en informarse y reflexionar sobre la violencia de género, desde una perspectiva de comunidad y apoyo mutuo.
Frente a la inexplicable decisión de la Municipalidad de Angol, de no contar con albergue este invierno, la Agrupación Olla Común de Angol a intensificado su labor solidaria, dado las bajas temperaturas y lluvias recientes que motivaron a esta comunidad a ir en busqueda del sector privado, para sumar aportes y apoyo. Dos personas con discapacidad, que viven bajo precarias condiciones junto a la ex Farmacia Municipal, recibieron ayuda gracias a estas gestiones. Situación que se agudiza, dado que el invierno recién comienza y ya golpea con fuerza a quienes no tienen un techo. En Angol, la Agrupación Olla Común de Angol, liderada por Katerine Arroyo, se ha convertido en el principal sostén para las personas en situación de calle, luego de que el municipio decidiera no habilitar un albergue para este año. A pesar de la falta de apoyo institucional, la fuerza de este Batallón de Amor y empresarios locales no han permanecido indiferentes. Durante las últimas horas, tras las lluvias y el frío intenso, nuevos colaboradores se han sumado con alimentos, ropa de abrigo y materiales para improvisar refugios. Un caso que refleja esta realidad es el de dos personas con discapacidad en sus extremidades que viven a un costado del Puente Vergara, en un sitio eriazo. Ellos han recibido abrigo y alimentos gracias a la solidaridad de quienes no los olvidan, donde la propia agrupación agradece a los empresarios Gerardo Cerda y Jorge Salazar por poner a su disposiciones materiales de construcción, trabajadores y herramientas para esta obra. @olla_comun_angol_respal2 ♬ sonido original - olla_comun_angol_respal2 Desde la Olla Común de Angol hacen un llamado a toda la comunidad a seguir apoyando, ya que se esperan semanas más difíciles para quienes no tienen un hogar. Quienes deseen colaborar pueden contactarse directamente con la agrupación al whattsap +56922472931 y colaborar con alimentos o sumarse como voluntarios a esta noble causa.