El Centro Cultural de Angol se convirtió ayer en el epicentro de una significativa jornada de diálogo con el conversatorio “Las señales que no vi”, una iniciativa organizada por la agrupación Justicia para Constanza Herrera Zavalla, que buscó visibilizar y prevenir las primeras manifestaciones de violencia en las relaciones de pololeo y como estas van escalando frente a los ojos del entorno de las personas violentadas que no logran captar estas señales.. Con un auditorio atento y participativo, el conversatorio inició a las dando paso a Marcela Pardo Gaete y Rocío Ortega Vargas, en representación del SERNAMEG, compartieron sus experiencias y herramientas para identificar señales tempranas de violencia y fomentar una cultura de denuncia oportuna. El momento más emotivo de la velada lo protagonizó Ana Zavalla del Pino, quien compartió “Mi experiencia personal, mi estandarte para seguir luchando por las mujeres”. Conmovidos, los asistentes escucharon su relato, cargado de fuerza, en el que expresó su necesidad de búsqueda de justicia por su hija Constanza Herrera Zavalla. En su relato Ana comenta como se ha erigido como símbolo de resiliencia e inspiración para padres y madres respecto a esta realidad, alzando la voz en contra del silencio. La respuesta del público fue unánime: el conversatorio fue considerado un verdadero “éxito”. Se valoró la exposición de los temas tratados, la calidad de los contenidos y el tono cercano y personal de las exponentes, transformándolo en una jornada nutritiva para el alma, el conocimiento y la conciencia colectiva. Como cierre, las organizadoras extendieron una invitación a la comunidad a participar activamente en futuras iniciativas y mantener vivo el compromiso con la erradicación de la violencia de género, reconociendo que solo a través del diálogo y la empatía es posible construir vínculos más seguros y respetuosos .
Hace más de 25 años, la psicóloga Carol Dweck cambió para siempre la forma de entender la motivación en los niños. Su estudio de 1998 reveló que la forma en que se elogia a los más pequeños influye directamente en su forma de aprender y enfrentar los desafíos. En su influyente investigación, Dweck, profesora de la Universidad de Stanford, trabajó con un grupo de más de 400 estudiantes de primaria. Su equipo analizó cómo reaccionaban los niños ante diferentes tipos de elogios: mientras unos recibían comentarios enfocados en su inteligencia (“¡Qué listo eres!”), otros eran reconocidos por su esfuerzo y estrategias de trabajo (“¡Qué bien trabajaste para resolverlo!”). Los resultados fueron sorprendentes: los niños elogiados por su esfuerzo eligieron tareas más difíciles y persistieron más tiempo frente a problemas complejos. En cambio, los que fueron alabados por su inteligencia mostraron miedo al error, evitaban retos y se frustraban fácilmente al fracasar. Dweck denominó estas formas de pensar como “mentalidad de crecimiento” y “mentalidad fija”. Desde entonces, estos conceptos se han expandido a escuelas, programas educativos y entrenamientos de liderazgo en algunos lugares en el mundo. Un cambio de paradigma educativo Su trabajo influyó en nuevas estrategias pedagógicas. Hoy, muchos colegios adoptan prácticas basadas en la mentalidad de crecimiento, promoviendo que los errores son parte del aprendizaje y enseñando a valorar la perseverancia por encima del talento innato. Incluso grandes empresas como Google y Microsoft han incorporado estos principios para fomentar la innovación y la resiliencia en sus equipos de trabajo. Críticas y nuevas investigaciones A pesar de su popularidad, la teoría de Dweck también ha recibido críticas. Algunos expertos sostienen que no basta con promover la mentalidad de crecimiento si no se proporcionan recursos, apoyo emocional y condiciones adecuadas para el aprendizaje. Por su parte, Dweck ha respondido a estos cuestionamientos actualizando sus investigaciones y subrayando que la mentalidad de crecimiento debe ir acompañada de estrategias efectivas y retroalimentación constructiva. Me siento con el deber de traspasar un legado que no conocemos y no ocupamos Más de dos décadas después de su publicación, este estudio me motivo a aplicarlo personalmente con mi hija, dado que leí un articulo sobra esta profesional que es una referente en la psicología educativa. Su trabajo invita a padres, profesores y líderes a reflexionar sobre cómo sus palabras y actitudes pueden sembrar en los niños la motivación para aprender, crecer y superar cualquier obstáculo. Puedo concluir de manera muy real que el resultado fue increíble, logrando que con las motivaciones y palabras correctas ella mejorara en tan solo un mes y medio su promedio general, subiéndolo en 7 puntos de manera muy metódica y comprometida.
Pese a que el SIMCE 2024 en Lectura marcó un récord con 278 puntos promedio en IV° básico —la cifra más alta desde que existe la medición—, la verdadera alarma está en los detalles: el 52,5 % de los estudiantes no logra comprender adecuadamente lo que lee. Esta cifra refleja una profunda crisis en los aprendizajes fundamentales que, lejos de resolverse, sigue presente en el corazón del sistema educativo chileno. El rezago lector no es solo una dificultad académica: es una barrera estructural que condiciona el futuro escolar, emocional y social de miles de niñas y niños. Las diferencias son especialmente marcadas entre estudiantes de distintos contextos. Mientras los sectores de mayores ingresos superan los 300 puntos de promedio, los más vulnerables apenas alcanzan los 258. En zonas rurales, la situación es aún más preocupante: uno de cada tres estudiantes presenta un nivel crítico de comprensión lectora. Estas brechas no solo se traducen en diferencias de rendimiento, sino también en autoestima, motivación y proyección de los estudiantes. Según Fundación Crecer con Todos, cerca de 113.000 niños y niñas estarían actualmente en riesgo por no lograr consolidar el proceso lector, especialmente entre II° y IV° básico, edades clave para cimentar la habilidad de leer con sentido. A pesar de estos desafíos, algunas organizaciones han comenzado a mostrar que es posible revertir la tendencia. Programas como Primero LEE y Viaje por las Letras han reportado avances positivos en el aprendizaje lector, con mejoras significativas en grupos intervenidos. Sin embargo, los esfuerzos aún son insuficientes frente a la magnitud del problema. El Ministerio de Educación ha mantenido una estrategia de reactivación de aprendizajes, con apoyo focalizado en escuelas prioritarias y programas de tutorías, pero los expertos coinciden: para superar esta crisis, se necesita un compromiso más amplio, sostenido y estructural. Porque mientras el país celebra récords de puntaje, más de la mitad de los niños aún no entienden lo que leen. Y sin lectura, simplemente no hay aprendizaje posible.
La Contraloría General de la República (CGR) envió un oficio a 232 municipalidades del país solicitando antecedentes sobre la aplicación de descuentos en los sueldos de profesores que hayan dejado de cumplir sus funciones al sumarse a paralizaciones. Esta medida se suma a una acción similar dirigida la semana pasada a los Servicios Locales de Educación Pública (SLEP). El organismo fiscalizador recordó en el documento que las entidades que forman parte de la Administración del Estado se encuentran obligadas a cumplir los principios de continuidad del servicio público; de eficiencia y eficacia, lo que implica satisfacer las necesidades colectivas en forma regular y continua, como también velar por la eficiente e idónea administración de los medios públicos y por el debido cumplimiento de la función pública. Además, reiteró lo establecido en el dictamen N° 52.122 de 2009, el cual señala que la ausencia de los servidores públicos de sus labores por adherir voluntariamente a una paralización irregular de actividades implica necesariamente el descuento a sus remuneraciones del valor del tiempo no trabajado, por cuanto esa situación no configura causal que justifique la inasistencia. Desde el Colegio de Profesores de Angol, intentamos tomar contacto con presidenta Sonia Ramírez, pero lamentablemente su teléfono estuvo inhabilitado para recibir llamadas. Por otra parte los apoderados tienen opiniones encontradas con la medida, así lo expresa la presidenta del centro de padres del Colegio Aragón Gemita Martínez Aguilera quien se pone en el lugar de los estudiantes y de los profesores. En línea con esto, la CGR solicitó a las municipalidades que detallen las acciones que han tomado para garantizar la continuidad del servicio durante las movilizaciones, así como las gestiones efectuadas para concretar los descuentos correspondientes. También deberán informar sobre cualquier otra medida implementada frente a esta situación. solicita La solicitud fue realizada por la División de Fiscalización del ente, que aseguró tener conocimiento de recientes paralizaciones protagonizadas por trabajadores de los SLEP. En el marco de sus atribuciones, la Contraloría reiteró que se requiere a esas entidades que informen acerca de las medidas adoptadas para dar continuidad al servicio durante la referida paralización y de aquellas que ha dispuesto para hacer efectivos los respectivos descuentos de remuneraciones que procedan, como asimismo, de otras providencias que dicha repartición haya adoptado en relación con la indicada situación. lota
Hoy se cumplen 117 años desde la fundación de la Escuela Normal de Angol, una de las instituciones más emblemáticas en la historia de la educación chilena. Creada el 4 de junio de 1908 mediante el Decreto Supremo N.º 3421 durante el gobierno del presidente Pedro Montt y bajo la gestión del Ministro de Educación Joaquín Amunátegui, esta escuela se convirtió en un faro formativo para generaciones de docentes en el sur del país. La Escuela Normal de Angol no solo entregó conocimientos pedagógicos, sino que también moldeó una identidad educativa en La Araucanía y otras regiones cercanas. Durante décadas, miles de estudiantes pasaron por sus aulas con la vocación de enseñar y transformar sus comunidades a través de la educación pública. En 1974, la institución cerró sus puertas como parte de la reestructuración del sistema formador de profesores en Chile. Sin embargo, su influencia persiste en los recuerdos de ex alumnos y en la memoria colectiva de Angol, donde sus ex alumnos se niegan a soltar el legado de esta casa de estudios. Este patrimonio cultural inmaterial de nuestra historia hoy vive prácticamente en el recuerdo de sus ex alumnos y alumnas, no podemos decir que el espíritu de la Escuela Normal de Angol sigue presente en cada rincón de nuestra ciudad, muestra de aquello es que no existió alguna actividad oficial en la comuna para resaltar esta importante fecha. A 117 años de su fundación, la Escuela Normal de Angol es un símbolo que nos debería motivar al compromiso, por contar con alternativas académicas que ampliaran la oferta y la posibilidad de oportunidades para una educación pública de calidad.normal de
El Centro Cultural de Angol se convirtió ayer en el epicentro de una significativa jornada de diálogo con el conversatorio “Las señales que no vi”, una iniciativa organizada por la agrupación Justicia para Constanza Herrera Zavalla, que buscó visibilizar y prevenir las primeras manifestaciones de violencia en las relaciones de pololeo y como estas van escalando frente a los ojos del entorno de las personas violentadas que no logran captar estas señales.. Con un auditorio atento y participativo, el conversatorio inició a las dando paso a Marcela Pardo Gaete y Rocío Ortega Vargas, en representación del SERNAMEG, compartieron sus experiencias y herramientas para identificar señales tempranas de violencia y fomentar una cultura de denuncia oportuna. El momento más emotivo de la velada lo protagonizó Ana Zavalla del Pino, quien compartió “Mi experiencia personal, mi estandarte para seguir luchando por las mujeres”. Conmovidos, los asistentes escucharon su relato, cargado de fuerza, en el que expresó su necesidad de búsqueda de justicia por su hija Constanza Herrera Zavalla. En su relato Ana comenta como se ha erigido como símbolo de resiliencia e inspiración para padres y madres respecto a esta realidad, alzando la voz en contra del silencio. La respuesta del público fue unánime: el conversatorio fue considerado un verdadero “éxito”. Se valoró la exposición de los temas tratados, la calidad de los contenidos y el tono cercano y personal de las exponentes, transformándolo en una jornada nutritiva para el alma, el conocimiento y la conciencia colectiva. Como cierre, las organizadoras extendieron una invitación a la comunidad a participar activamente en futuras iniciativas y mantener vivo el compromiso con la erradicación de la violencia de género, reconociendo que solo a través del diálogo y la empatía es posible construir vínculos más seguros y respetuosos .
Hace más de 25 años, la psicóloga Carol Dweck cambió para siempre la forma de entender la motivación en los niños. Su estudio de 1998 reveló que la forma en que se elogia a los más pequeños influye directamente en su forma de aprender y enfrentar los desafíos. En su influyente investigación, Dweck, profesora de la Universidad de Stanford, trabajó con un grupo de más de 400 estudiantes de primaria. Su equipo analizó cómo reaccionaban los niños ante diferentes tipos de elogios: mientras unos recibían comentarios enfocados en su inteligencia (“¡Qué listo eres!”), otros eran reconocidos por su esfuerzo y estrategias de trabajo (“¡Qué bien trabajaste para resolverlo!”). Los resultados fueron sorprendentes: los niños elogiados por su esfuerzo eligieron tareas más difíciles y persistieron más tiempo frente a problemas complejos. En cambio, los que fueron alabados por su inteligencia mostraron miedo al error, evitaban retos y se frustraban fácilmente al fracasar. Dweck denominó estas formas de pensar como “mentalidad de crecimiento” y “mentalidad fija”. Desde entonces, estos conceptos se han expandido a escuelas, programas educativos y entrenamientos de liderazgo en algunos lugares en el mundo. Un cambio de paradigma educativo Su trabajo influyó en nuevas estrategias pedagógicas. Hoy, muchos colegios adoptan prácticas basadas en la mentalidad de crecimiento, promoviendo que los errores son parte del aprendizaje y enseñando a valorar la perseverancia por encima del talento innato. Incluso grandes empresas como Google y Microsoft han incorporado estos principios para fomentar la innovación y la resiliencia en sus equipos de trabajo. Críticas y nuevas investigaciones A pesar de su popularidad, la teoría de Dweck también ha recibido críticas. Algunos expertos sostienen que no basta con promover la mentalidad de crecimiento si no se proporcionan recursos, apoyo emocional y condiciones adecuadas para el aprendizaje. Por su parte, Dweck ha respondido a estos cuestionamientos actualizando sus investigaciones y subrayando que la mentalidad de crecimiento debe ir acompañada de estrategias efectivas y retroalimentación constructiva. Me siento con el deber de traspasar un legado que no conocemos y no ocupamos Más de dos décadas después de su publicación, este estudio me motivo a aplicarlo personalmente con mi hija, dado que leí un articulo sobra esta profesional que es una referente en la psicología educativa. Su trabajo invita a padres, profesores y líderes a reflexionar sobre cómo sus palabras y actitudes pueden sembrar en los niños la motivación para aprender, crecer y superar cualquier obstáculo. Puedo concluir de manera muy real que el resultado fue increíble, logrando que con las motivaciones y palabras correctas ella mejorara en tan solo un mes y medio su promedio general, subiéndolo en 7 puntos de manera muy metódica y comprometida.
Pese a que el SIMCE 2024 en Lectura marcó un récord con 278 puntos promedio en IV° básico —la cifra más alta desde que existe la medición—, la verdadera alarma está en los detalles: el 52,5 % de los estudiantes no logra comprender adecuadamente lo que lee. Esta cifra refleja una profunda crisis en los aprendizajes fundamentales que, lejos de resolverse, sigue presente en el corazón del sistema educativo chileno. El rezago lector no es solo una dificultad académica: es una barrera estructural que condiciona el futuro escolar, emocional y social de miles de niñas y niños. Las diferencias son especialmente marcadas entre estudiantes de distintos contextos. Mientras los sectores de mayores ingresos superan los 300 puntos de promedio, los más vulnerables apenas alcanzan los 258. En zonas rurales, la situación es aún más preocupante: uno de cada tres estudiantes presenta un nivel crítico de comprensión lectora. Estas brechas no solo se traducen en diferencias de rendimiento, sino también en autoestima, motivación y proyección de los estudiantes. Según Fundación Crecer con Todos, cerca de 113.000 niños y niñas estarían actualmente en riesgo por no lograr consolidar el proceso lector, especialmente entre II° y IV° básico, edades clave para cimentar la habilidad de leer con sentido. A pesar de estos desafíos, algunas organizaciones han comenzado a mostrar que es posible revertir la tendencia. Programas como Primero LEE y Viaje por las Letras han reportado avances positivos en el aprendizaje lector, con mejoras significativas en grupos intervenidos. Sin embargo, los esfuerzos aún son insuficientes frente a la magnitud del problema. El Ministerio de Educación ha mantenido una estrategia de reactivación de aprendizajes, con apoyo focalizado en escuelas prioritarias y programas de tutorías, pero los expertos coinciden: para superar esta crisis, se necesita un compromiso más amplio, sostenido y estructural. Porque mientras el país celebra récords de puntaje, más de la mitad de los niños aún no entienden lo que leen. Y sin lectura, simplemente no hay aprendizaje posible.
La Contraloría General de la República (CGR) envió un oficio a 232 municipalidades del país solicitando antecedentes sobre la aplicación de descuentos en los sueldos de profesores que hayan dejado de cumplir sus funciones al sumarse a paralizaciones. Esta medida se suma a una acción similar dirigida la semana pasada a los Servicios Locales de Educación Pública (SLEP). El organismo fiscalizador recordó en el documento que las entidades que forman parte de la Administración del Estado se encuentran obligadas a cumplir los principios de continuidad del servicio público; de eficiencia y eficacia, lo que implica satisfacer las necesidades colectivas en forma regular y continua, como también velar por la eficiente e idónea administración de los medios públicos y por el debido cumplimiento de la función pública. Además, reiteró lo establecido en el dictamen N° 52.122 de 2009, el cual señala que la ausencia de los servidores públicos de sus labores por adherir voluntariamente a una paralización irregular de actividades implica necesariamente el descuento a sus remuneraciones del valor del tiempo no trabajado, por cuanto esa situación no configura causal que justifique la inasistencia. Desde el Colegio de Profesores de Angol, intentamos tomar contacto con presidenta Sonia Ramírez, pero lamentablemente su teléfono estuvo inhabilitado para recibir llamadas. Por otra parte los apoderados tienen opiniones encontradas con la medida, así lo expresa la presidenta del centro de padres del Colegio Aragón Gemita Martínez Aguilera quien se pone en el lugar de los estudiantes y de los profesores. En línea con esto, la CGR solicitó a las municipalidades que detallen las acciones que han tomado para garantizar la continuidad del servicio durante las movilizaciones, así como las gestiones efectuadas para concretar los descuentos correspondientes. También deberán informar sobre cualquier otra medida implementada frente a esta situación. solicita La solicitud fue realizada por la División de Fiscalización del ente, que aseguró tener conocimiento de recientes paralizaciones protagonizadas por trabajadores de los SLEP. En el marco de sus atribuciones, la Contraloría reiteró que se requiere a esas entidades que informen acerca de las medidas adoptadas para dar continuidad al servicio durante la referida paralización y de aquellas que ha dispuesto para hacer efectivos los respectivos descuentos de remuneraciones que procedan, como asimismo, de otras providencias que dicha repartición haya adoptado en relación con la indicada situación. lota
Hoy se cumplen 117 años desde la fundación de la Escuela Normal de Angol, una de las instituciones más emblemáticas en la historia de la educación chilena. Creada el 4 de junio de 1908 mediante el Decreto Supremo N.º 3421 durante el gobierno del presidente Pedro Montt y bajo la gestión del Ministro de Educación Joaquín Amunátegui, esta escuela se convirtió en un faro formativo para generaciones de docentes en el sur del país. La Escuela Normal de Angol no solo entregó conocimientos pedagógicos, sino que también moldeó una identidad educativa en La Araucanía y otras regiones cercanas. Durante décadas, miles de estudiantes pasaron por sus aulas con la vocación de enseñar y transformar sus comunidades a través de la educación pública. En 1974, la institución cerró sus puertas como parte de la reestructuración del sistema formador de profesores en Chile. Sin embargo, su influencia persiste en los recuerdos de ex alumnos y en la memoria colectiva de Angol, donde sus ex alumnos se niegan a soltar el legado de esta casa de estudios. Este patrimonio cultural inmaterial de nuestra historia hoy vive prácticamente en el recuerdo de sus ex alumnos y alumnas, no podemos decir que el espíritu de la Escuela Normal de Angol sigue presente en cada rincón de nuestra ciudad, muestra de aquello es que no existió alguna actividad oficial en la comuna para resaltar esta importante fecha. A 117 años de su fundación, la Escuela Normal de Angol es un símbolo que nos debería motivar al compromiso, por contar con alternativas académicas que ampliaran la oferta y la posibilidad de oportunidades para una educación pública de calidad.normal de